viernes, 12 de abril de 2013

Los Viajes de Colón.

El viaje del Descubrimiento: 1492

El primero y trascendental de los viajes a América se inició en el puerto de Palos de la Frontera el 3 de agosto de 1492 formando una flota de tres naves, la Santa María (a bordo de la cual iba Colón), la Pinta y la Niña.
Este viaje (de Canarias a América) duró poco más de cinco semanas casi siempre con vientos favorables.

El Segundo Viaje: la colonización.

El 25 de septiembre de 1493 se iniciaba el segundo viaje de Colón. Las prisas por organizar esta segunda travesía hay que atribuirlas a los deseos del Almirante de demostrar que había llegado a Asia y al temor de los Reyes Católicos a que sus rivales portugueses intentasen algún tipo de exploración por los nuevos territorios, ya que según el Tratado de Alcaçovas les pertenecería cualquier descubrimiento realizado al sur de las Islas Canarias.


El tercer viaje: el Paraíso Terrenal.

En mayo de 1496 partió una tercera tentativa de Colón, al mando de una flota de seis barcos, para demostrar que había llegado a Asia viajando hacia el oeste. Además de encontrarse con que los españoles de América se habían rebelado contra su autoridad, quizás el mayor descubrimiento de este viaje fuese la desembocadura del río Orinoco.
Este viaje termina sin que el Almirante encuentre Cipango (Japón) ni las costa de China, e incluso ante las noticias de rebeliones y abusos, los reyes enviarán desde España a poner orden a Francisco de Bobadilla, quien empezó por retirarle a Colón toda su autoridad en aquellas tierras y terminó por encarcelar a Colón y sus hermanos. De hecho, el viaje de vuelta a la península en el año 1500 lo hizo Colón preso y encadenado.

El cuarto viaje. Muerte de Colón.
A pesar del desastroso final del tercer viaje Colón vio cambiar su situación y, aunque los reyes no le devolvieron los poderes y privilegios que le concedieron en las Capitulaciones de Santa Fe, le encargaron un cuarto viaje iniciado en 1502 con el objetivo de descubrir el paso hacia Asia. Colón llegará a tocar tierra en la zona de Panamá, pero una vez más tuvo que regresar sin cumplir sus objetivos. Morirá en Valladolid en 1506 sin haber conseguido su objetivo, desposeído de sus cargos y sin saber que había descubierto para los europeos el “Nuevo Mundo”.